¿Alguna vez has sentido la necesidad de escribir para vivir?
El miedo de reiniciar lo que amas,
la satisfacción de saber que estás vivo,
dícese de la gente con mayores traumas
del verbo “juzgadas por diferente motivo”.
¿Es inusual pensar anormal?
¿O es peor ser igual a los demás?
¿Amas lo que eres? ¿Amas lo existencial?
Sufres por quien eres, sufres por estar atrás.
Abandono, solitario, triste pero digno,
ignorado en tu tramo podrido,
hoy renaces como ser maligno,
mañana vistes como hombre resurgido.
Más fuerte, sin miedo y sin fé,
un toque de infierno en tu piel,
conquistas a las damas con un café,
perviertes el alma para ser infiel.
Motivas emociones para tu bien,
has cambiado en cuerpo, mente y ser,
vives siendo imperfectamente perfecto en vaivén,
mueres el día en que tus traumas se adueñaron de tu temer.
¿Alguna vez has sentido la necesidad de escribir para morir?