Mi coche tiene abono
en el número nueve
a veces no lo encuentro
pienso que alguien lo mueve.
Camino por las calles
besando tus ausencias
subo las escaleras
voy buscando tu esencia.
Me equivoco de piso
y no pregunto a nadie
perdido en las hileras
en las que no me fijo
sin que tu amor me irradie.
No puedo perdonarme
soy culpable y me muero
no dejo de acordarme
que no te dije a tiempo
lo mucho que te quiero.
La radio está encendida
despiertas madrugadas
no habla de tu huida
yo besando la almohada
No tengo idea del tiempo,
el ayer es mañana
cuando el sol arrogante
irrumpe en mi ventana.
Todavia en el armario
dormita tu vestido
y un reloj de pulsera
sigue dando la hora
del día que te habías ido.
Vivo sin calendario
ya todo poco importa
no escribo en mi diario
es mi vida que aborta
en mi propio escenario.
Quizás fue mi torpeza
por no haber aprendido
que el amor cuando empieza
acaba en lo perdido
por no decir: “te quiero”
el momento debido.