Hace ya bastante tiempo que lo entendí, y con todo el dolor del mundo acepte que nunca más volverías a estar aquí, hay cosas imposibles de revertir, de olvidar como aquel beso tierno en la más bella tarde de abril, ya entendí que el dolor es inevitable pero sólo uno decide cuanto quiere sufrir, por ello deje de llorar por ti cuando asentí a mirar mi realidad, a continuar igual estando solo y bajo la lluvia estival, quiero pensar que de último estaras presente en mi funeral, que no hecharas en saco roto mi promesa en calidad de siempre estar en algún lugar, sí de pronto me necesitas, entre mi mar de botellas y latas extintas, entre el amor que voy olvidando entre palabras escritas, entre notas y conquistas, bajo el drenaje como las ratas, con las alas rotas, sin rutas ni atajos hacia tus ojos cuando me retas; Ya no hace falta, princesa, que tu nuevo amor se siente con nosotros a la mesa, yo ya entendí y acepto mi desgracia, me bebo mi tristeza, me fumo la distancia, convivo con tu esencia, con tu ausencia y tu presencia tan lejana, porque sé que despertaré mañana y seguiré tan solo y sin nada, ya entendí que daría igual seguir mirando por la ventana, esperando tu llegada lozana, ya entendí que no siempre pierde el que no gana, que no se puede vivir en la luna sin tener los pies en la tierra y que la espera desgasta más cuando es en vano, si se va a la guerra sin fusil aun teniendo tus manos, por algo soy escribano y he de dejar de vivir por alguien para empezar a vivir por algo........esto.