Llegaste a mi en una tarde,
no muy fría,pero de invierno,
una tarde para mi,
para ti una mañana, lo recuerdo,
que aquí el sol se ponía,
y aseguro vida mía
que la luna yo ví aquel día,
que pasaron aquellas horas,
que llego de nuevo el sol,
que otra vez te busqué,
busqué y te encontré,
presumí la puerta abierta,
y queriendo la traspasé,
a sentir tales pláticas y vivencias,
que se tornaban compañía,
y hacían mas feliz,
la forma de mi vida,
seguido empezaste a acompañarme,
en esos todos mis días,
cada vez más,se hacia grata,
tu dulce sintonía,
de tu forma de tratar,
de hablar,de arropar cada vez más,
fabricando mas estrecha y amena,
la ilusión de una amistad tan sincera,
y así llego la primavera
y acompañarnos,
se volvió una bendición,
una ilusión que era mutua,
porque estando tu,
estábamos los dos,
cada vez mas juntos,
mas unidos y sin condición,
los campos eran bellos,
los valles perfectos,
y así me decías
siempre que los veías,
a la vez que en ti evocaban
y seguido me contabas,
tus bellos recuerdos de niña,
llego el solsticio del verano,
y mi tiempo fue limitado,
tu sabias,seguiste esperando,
entendiste de mi vida,
y yo te seguí amando,
¡¡y aquí estamos!!
aquí y ahora llegamos,
queriendonos en esta distancia,
extrañandonos sin reservas,
sabiendo que nos necesitamos,
viajando la mente,sintiendo este viaje,
de acá para allá,con poco equipaje,
y sabiendo a cada momento
que algo irrepetible estamos viviendo,
¡¡algo grande!!
que sólo tuvo y tiene sentido,
solo porque fue y es....
SOLO CONTIGO.
SSM - 29-08-2014.