Gracias
por escucharme
por sostenerme
por abrazarme.
Te escucho
te abrazo
te quiero
te aprecio
te valoro.
-Gracias por quererme
a pesar de todo.
-Mucho del secreto de la felicidad
radica en aceptar tanto el otoño como la primavera;
tanto la alegría como la tristeza
y saber que la vida es lo que es y no lo que debiera.
-Dime:
¿ La felicidad es un término medio entre la alegría y la tristeza?
-No existen una sin la otra,
las dos son signos de vida
los muertos tienen sed los vivos culpas.
Soy culpable de mi infelicidad;
soy culpable de mi soledad:
soy culpable de mi miopía;
-¡Eres culpable de culparte!
¡Eres juez implacable al no perdonarte!
Siempre pensé que detrás de todo sapo había un príncipe.
Me paso al revés,
besé al príncipe y resultó ser un sapo.
-Siempre hay alguien para ti
esperando
por ti al la vuelta de la vida
pensándote,
buscándote.
Aparecerá cuando perdones al ser humano que hay en ti.
-Ya no espero a nadie
no tengo nada para ofrecer a nadie.
-Cuando ya no esperes
llegará de pronto
como la luz,
te lo dará todo sin esperar nada;
te llenara de amor,
de luz,
de paz
y tendrás tanto amor que creerás que estas soñando
para que lo perciba tendré que vaciar el alma.
¡Llegará!
-No lo creo
ya, ni lo deseo,
me volví escéptica a los sentimientos...
Discúlpame hablan mis devaríos