La mujer que amo
Se despoja de sus ropajes
Ya que se viste con mi deseo
Los trazos de su vestido los diseñe
Con cada beso tejido en tu piel
Hilvanado con mis labios incendiarios
Que nacieron con el calor de las caricias
Desbordado entre mis dedos,
He colocado en ese vestido broches
De lujuria matizándolo con cada roce
De nuestros cuerpos.
De las noches lesivas que prendieron los cuerpos
En la luchas de tu tierna piel.
En este vestido he dejado al descubierto
Tu espalda dejando mostrar la sensualidad
De tu espalda para que mis dedos
Forjen en tu carne mi nombre.
Entre un manto de tul dorado
En el cual se labra en su trama
El sabor salado del sudor que pintaste mis sabanas
Como un lienzo
alli estampaste tu cuerpo
Jadeante, febril, rebosante de lascivo perfume
Que despierta el placer sustantivo, entre mis comas
y puntos suspensivos .
asi te visto entre miradas
que van decorando de pasión tu cuerpo
sembrando en cada poro
marejadas que se desbordan por los archipiélagos
de tu delicado cuerpo,
alzando el vuelo de gemidos
a tres metros sobre tu corazón soy mas tuyo que nunca
mil oleajes que atropellan tus labios, tu cuello, tu abdomen
que empujan a tu centro el velero que navega
por los mares húmedos de la ternura , sensual idad.
me sumerjo en ese calor veraniego
de tu vestido que he diseñado con los hilos de mi mirada
hilvanado con pasión, lujuria
cada noche frente a tu retrato
desnudo que guardo en mi mente…..