Cuando decidí amarte mi corazón brincaba de la alegría
Cada cosa que me recordaba a ti era felicidad
Los días dejaban de ser grises cuando tú me escribías
Mi vida era perfecta cuando estabas junto a mí.
Con el tiempo me di cuenta que te estaba perdiendo
Que había alguien que te hacia sonreír
Alguien que con una sonrisa te robaba el corazón
Al ver esa sonrisa en tu rostro llore de tristeza
Y pensé que lo mejor seria que te dejara ir
En las noches mi corazón lloraba y no entendía lo que sucedía
No sabia como explicarle a mi corazón que yo no te hacia feliz
Que tu felicidad dependía de alguien más.
Por más que trate de buscar una solución jamás la encontré pues tú ya eras feliz, yo solo quería arrancarme el pelo y correr muy lejos, gritar a los 4 vientos que yo te amaba de verdad pero que nunca hice nada por verte sonreír. Ahora entiendo que amar no es solo un beso, un abrazo, es esmerarte que la otra persona sea feliz, es verla a los ojos y decirle que tú vives por su felicidad.
Mi corazón se ha quedado pequeño a gritado en su muro pero nadie lo ha escuchado. Nadie sabe que mi don es amar en silencio, que los celos me matan y envenenan mi cabeza.