Managua, 8 de agosto 2014
Aunque un día me vuelva loco
de recibir tu amor poco a poco,
llenará mi estancia tu presencia
y en esta enorme distancia...
invocará tu nombre.
Y sabrás que no amaré así,
después de amarte a ti.
No conocerán mis brazos
otros abrazos después de los tuyos y
mi boca no conocerá otra boca
después de probar tus besos.