Ven cuando quieras
y pasa por mi boca
a cobrar los besos
que te quedaron pendientes.
Te tengo en un rinconcito de mi corazón
que sólo tú sabes hacerlo cada vez más grande
y tengo mis alas abiertas de par en par
para recibir tus abrazos.
Mientras trataré
de vivir mi vida lo mejor que pueda
para que cuando decidas encontrar mis labios
sólo pueda darte felicidad.