teresa ternavasio

A FEDERICO GARCÍA LORCA

A FEDERICO GARCIA LORCA

 

La luz del genio estalló en palabras

Y las dimensiones guardaron el verso

Sentimientos y canto están presos

Del  embrujo que llega, como un rezo

 

Serafines hacen ronda al talento

Y en el viento, se percibe el aliento

No se ha ido, ni ha perdido su esencia

Entre los mortales, está su presencia

 

Le cantó al amor, himno sublime,

Dicho en poemas, que invadieron el alma,

Y las olas del mar tuvieron calma,

Frente al avasallador incontenible

 

Fue el muro levantado por tristezas

Y su fuego guardián de fortalezas,

Inspiración de pasiones dominantes,

Que en sus entrañas llevan los amantes

 

Labrador de sonetos y romances,

Constructor del drama y de la lírica,

La maldición marcó su poca suerte

Y el ardor de su alma, lo llevó a la muerte