Mauro Enrique Lopez Z.

No sé por qué llovía.

Aquella tarde que llovía

y tú y yo en ese viejo motel

y me prometistes amarme toda la vida,

no sé por qué llovía, talvés  fue porque

escuchaba tus mentiras

que hoy no lo haces, porque no estás,

ni te veo desde hace días

y hasta llorastes pidiéndome que no te abandone

que te amé siempre,

Hasta hoy lo hago!

Y tú no llegas ni con un mensaje,

no sé por qué no cae esa suave brisa

será porque tú no estás para mentir

como llorastes y yo como un gil te consolaba

o tienes amor al engaño para darle

al que te ama desde ese día.