LO QUE SUCEDE, CONVIENE
“Lo que sucede, conviene” me dijo un amigo, con frase acertada…
Una experiencia que parecía mala, resulta la mejor,
si está bien interpretada.
Como en las lluvias o en las tormentas,
como en la nieve o en alguna cena suculenta…
Como es lo bueno, que si breve,
dos veces bueno; y lo malo que se nos hace leve,
cuando en el mal tiempo se nos concede
buena cara, con los hechos que nos suceden,
por muchas causas, en nuestras vidas,
que se hacen malas o, quizás, buenas conocidas,
según uno las tome y su filosofía,
según los ánimos de cada día,
según sepamos cómo de ellas aprender,
según nuestra capacidad de entender
cada detalle de esas ocasiones,
donde aprenderemos –o no- esas lecciones,
ya que será antes, o después será,
cuando de ellas, todos -o algunos-, aprenderán
que, aunque sean livianas, pesadas, feas o hermosas,
sean como sean o se llamen- , total... ¡ igual es la cosa...!
porque está en cómo cada uno las tome
y en qué clase de espíritus ellas se asomen,
en cada uno de nosotros, hermanos,
que amamos y odiamos,
como... simples humanos.
Eduardo Faucheux
13-08-2014