Sergio Jacobo "el poeta irreverente"

B. E.

 

Silencio       -mucho silencio-

Entre tu cuerpo y el mío se filtraba

pero mi mano  (esta mano)

                    triste quizás 

pero bañada en el deseo brutal  por tus antojos

acaricio tu pierna        (esa piel tersa y blanca)

así mi morena mano se perdía

mientras mis dedos se paseaban en tu sexo

y mi boca se prendía en tu beso.

 

Tu sombra se dibujaba en la mesa

donde los vasos de tequila y tu cerveza

hacían  juego tal vez con tu sonrisa

que se ahogaba en mi cuello y en mi boca…

el humo se expandía en la estancia

de los cigarros que ambos  nos fumamos

¡pero qué tontería  abandonar aquél momento!

Aquellos segundos en que en tus brazos

       quería detener esos  -esos segundos-

cuando mis manos en tu cuerpo se quemaban.

O el aliento de mi boca en tu oído

o mirar tus ojos sin decirte nada…

 

 

Silencio       -mucho silencio-

Entre tu cuerpo y el mío se filtraba