Se me fuga el sentimiento
en cada suspiro dado
recibido por el viento
con el amor mal logrado.
Me define la melancolía
con una mueca hiriente,
se acabo la rebeldía
de este combatiente.
Ahora me desquebrajo
en el abismo del olvido,
soy campana y badajo
que resuena prohibido.
Si ya no me queda nada
para que quiero tu recuerdo,
llevatelo como en manada
ya que yo seguro lo pierdo.