Residuos del mundo
Liliana Savoia
En el cielo agrisado de otoño
el aire se condensa,
tan espeso y pegajoso
como mermelada de infancia.
Sobre los árboles que lloran
ya no juegan palomas sino murciélagos
y, las calles desiertas de mimbre,
no recuerdan
el recuerdo del silencio gastado
y el repiquetear de la pelota de cuero.
En las últimas vidrieras, los zapatos tienen
cuero de víbora
y viejas costuras de agua.
La ciudad luce como una esfera
o un azul conteiner
donde los residuos del mundo se adosaron
en un triste rumor ,
el mismo que inventa la piedra cuando sueña,
o cuando llora
o, cuando la luna toma atajos impredecibles
y, entre cantos de desahogo
lama al desamparo para que disfrace
con telas livianas sus mejillas anémicas
y pasee solo si se les da la gana.
Liliana Savoia
http://savoialola.wix.com/savoia--escritora