Como si los mares fueran a quedarse sin peces,
los pescadores se han ido a las ciudades,
viviendo en ella falsedades,
y algunas verdades pocas veces.
Muchas redes estan abandonadas
de las manos que decían amarlas.
Bajo el sol esperan chamuscadas,
deseando que algun pescador,venga a besarlas.
Como una vela que se va quedando sin cera,
por el calor constante de la flama.
Así el mar por mas que al pescador aclama,
ahun espera...
Bernardo Arzate