En las madrugadas frías
cuando por esos labios, manos y brazos
se añora la ausente fantasía
y corre el desbocado pensamiento
tras ese sueño de ardorosas melodías...
Se sabe entonces que el amor es verdadero.
Porque si duele el aliento en la voz callada
sin respirar el calor de la boca ansiada,
y se desea el pecho para descansar la caricia no dada
y el pecho oprimido silencia quejas
en la alcoba que suena hueca...
se sabe entonces que el amor es verdadero,
porque yo lo sé ...por eso sueño nuestro encuentro.