Cuando sueño contigo vida mía
relucen en el cielo las estrellas
emulando tu pelo están más bellas
rubias coquetas cuando llega el día.
El universo conserva las huellas
de tu pelo que al volar las bruñía
y que al sol su fulgor le transgredía
tu pureza, la envidia de doncellas.
Al despertar siento un deseo fuerte
de mirar tus pupilas otra vez
a mis sentidos he de convencer
Que la muerte no me puede vencer
que mi cuerpo, ya con su ingravidez
cruzará las galaxias para verte.