Pensar que después de ti vendrán noches inmensas;
noches en las que maldeciré la suerte de quien ocupe mi lugar.
Noches en que tendré que fingir sonrisas, caricias y sonidos;
noches en que sentiré todo más frío a falta de tu calor;
noches en las que, de madrugada, despertaré necesitando de ti y no podré hacer más que conformarme conmigo misma.
Noches en que escribiré por necesidad y no por gusto;
noches en las que, luego de recordarte, no me quedará más que teclear mis penas a ver si hacen que otros se sienta identificado.
Noches en que seremos yo, tu retrato y las mil palabras que aun no me atrevo a decir confiando que estarás para siempre.
Yoranmi Santiago