Antonio Caro

Soñé.

 

 

Me desperté paseando por un parque desconocido, sin saber donde estaba, ni como llegue allí entre rosas y jazmines te vi.

 

Aturdido y confuso hacía ti mis pasos dirigí, crucé por  senderos y caminos, me embriagaba el aroma de su dulce frescor.

 

Te acercaste a mí, se cruzaron nuestras miradas, mi corazón se paro, el roce de tu piel la mente me nublo, mi cuerpo y el tuyo unidos por amor.  

 

Tus ojos negros perforaron mi ser, como brasas ardientes de negro carbón se grabaron en mi piel, tus labios y los míos se unieron al fin.  

 

Me quedaría en tus brazos siempre mi amor, llore de amargura al despertar y comprobar que este sueño no se haría nunca realidad.