Retocando mi corazón voy deshilando la estupidez,
Junto a ese vino que adorna mi cava,
Pasan los minutos y empiezo a desnudar al payaso,
que camina tras la esfera y que con su enorme zapato la aleja,
Hasta volverla inalcanzable.
Se desvanece mi posición de jarrón,
Aceptar tu voluntad, así asea tu voluntad,
Mil plegarias, para mis raíces y mis ramas,
Cuando la inseguridad me abraza con desesperación.
Me desnudo ante ti,
no tengo bolsillos donde guardar
mis sueños concretados,
Este caminar con mis pies descalzos,
¡ El dolor se respeta no se tranza!.
No dar pasos a atrás,
¿ donde aprendí esto?
Hoy me siento tan pequeña.