Amado mío.
La gloria de tus besos no se compara
en nada al placer de soñarte, de vivirte,
de conocer el aroma de tu piel, de besarte,
eso es soñarte.
Y si por volver a probar tus labios he de morir;
moriría con gusto amado mío, si de doncella
tuviera que pasar a ser guerra lo haría por
la dicha de volver a sentir tu respiración el la mía.
Yo por tí, cruzaría desiertos, valles, colinas,
el polo norte; tan solo por volver a verte y me impondría
a cualquier adversidad si supiera que tus ojos al mirarme
ven mas álla de mi alma.
Saltaría las barreras que nos impiden estar juntos,
por ti amor mío mataría dragones y cazaría monstruos;
si tan solo dijeras TE QUIERO me olvidaría de todo,
y seria solamente tuya, tuya como antes de besarte,
tuya como antes de tocarte.
Y tan solo tuya como antes de soñarte.