Darío Ernesto Muñoz Sosa
Poema para Gustavo Cerati
Mi voz vibró tus suspiros, mi referente
Mientras corrían los años adolescentes
Un torrente, de baladas divinas
Pues en la vida he cantado, tus canciones mi hermano,
Mi hispano y latino de letras hermosas
Mi alma se quiebra sin tu aliento, mi lento peregrinar
Es un lamento en la tarde triste,
¡Oh mi corazón cruje como los viejos portales!
He abandonado mi fe en que tu vivieres
Tu, amigo de mis nostalgias
Entraste como la brisa en las mañanas,
Alegrando mi garganta, pues cantando soñé
El sueño de llegar al cielo infinito.
Ruin la rutina que embebe mis días
Cuando al tomar conciencia, mis ojos lloran rocíos
Y acaricio mi guitarra, evocando tu melodía
Una daga atravesó mi pecho, recordar cada poesía.
Oír que tu alma entro al sueño profundo,
El cielo mío este día se quedó sin estrellas
Neblina, melancolía, pena,
Han quedado mis brazos extendidos, no pudiendo abrazarte
Vuelan tus canciones como satélites
Universo de mil colores,
Desde mi tierra evoco un rezo
A ti , héroe de mis imberbes canciones bellas.