En mis noches eternas
de soledad e insomnio
solo imagino que tú estas aquí,
siento tu aliento tan cerca,
tus cálidos brazos, tus manos,
tus hábiles e inquietos dedos
que sutilmente hurgan mi adentros...
Entonces, se encienden los fuegos,
la sangre se agolpa en mi pecho
mi respiración se agita de tal modo
que dejo escapar intensos jadeos,
se interrumpe el silencio de la alcoba...
Vienes y calmas con tu etérea imagen
mis ansiedades, mi desasosiego,
Eres en mi vida, ¡todos mis anhelos!
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LIAAZHANY