A veces cuando miro por la ventana
solo veo sueños inalcanzables
y algún que otro de esos deseos
que se extravían en el anhelo.
Y otras veces solo me pierdo
en pensamientos laberínticos
de un pasado ya olvidado
que solo tienen razón de ser
en esos mundos oníricos,
que al parecer, solo yo puedo ver.
Podría ser peor, digo para mí mismo,
pues solo yo sé lo que he vivido,
en esos días cálidos de juventud
cuando éramos solo mi esperanza y tú.
Siempre te recordaré con cariño,
pues más allá de los resultados,
una parte tuya quedó en mí,
en mi experiencia del vivir.
Si me encuentro algún que otro día,
con esa añoranza por aquella vida,
solo será porque hago
turismo por el pasado.
Gracias por haber estado,
y aún hacer eco de tus palabras,
con esfuerzo me han mejorado,
y hoy soy todo lo que hemos logrado.