¿Cuánto hay por explorar
en los senderos de la ausencia;
en las habitaciones del olvido…?
¿Cuánto por cosechar
en los mares de la Luna;
en la tierra de los silencios…?
Camino por la oscuridad,
bebiéndome el misterio de la Luz;
el más allá de toda maravilla
de este Cajón de fondo imposible…
A través de tu Azul
respiro eternidad…
Llegué de tu mano
Círculo resplandeciente
y soy todo en presente,
fracción de tu claridad…
Me alimenta la inquietud del sol;
el pulso de la noche;
el borde del abismo
en donde se descalza mi voz…
Cuánto más va a ocultar
el traje de los sueños,
que al desnudar mi respiro,
me arrebata hasta descontrolar
mi aguerrida esencia…
Cuánto más va a despejar
el canto del violín
en violentas ráfagas de verdades,
que hunden su daga en la Herida…
Y que preciso como llave
en el transitar de la existencia…
Solitaria la estrella de mi lengua,
-cristal y piedra-,
juglar de la ilusión que pisa mi carne,
se sujeta plena de candor
de tu infinito Lenguaje…