¿De dónde nacen tus muslos de seda
y los halos castaños que acarician tu pelo?
con tu risa asoma en ti
un brillo claro, puro, intenso;
Y ya eres sol,
ya eres luz,
ya eres día.
Pero con tu lágrima
el cielo pálido su faz grisacea.
y ya eres lluvia,
ya eres nube,
y también tormenta.