Cae la noche y los ojitos se comienzan a cerrar
Por el cansancio del día, después de tanto jugar.
La camita está a la espera, a que puedan descansar,
Sobre la sábana limpia, con suave olor de azahar.
La almohada muy suavecita, para poder colocar
La cabecita pequeña, que no para de soñar.
Con mariposas, palomas, y con las olas del mar,
Con una barca pequeña para poder navegar.
Llegar hasta el horizonte y desde allí observar,
Cómo llegan a la orilla las barcas de otro lugar.
Así el sueño va llegando y dormida va a quedar
Esa dulce criatura, que ¡tan tierna sabe amar!
Vero
06.09.14