Chiquita y Gigante,
Pequeña y tan grande,
Así sos mi vida,
como yo quería.
Tus sueños no duermen,
explotan tus ansias,
reclamas justicia,
por lo que te enfada.
Sos simple y sin vueltas
sos pura de alma,
y encuentro en tus brazos,
tu amor que me calma.
Tus Padres te han hecho,
de buena madera,
la hija perfecta,
la madre sincera.
Tu sombra fulgura,
tu amor me alimenta,
contagias tu magia,
donde tu la llevas.
Doy gracias a Dios,
por la que tu seas,
Amor de mi vida,
tan Grande y Pequeña.
Al Amor de mi vida.