La triste melodía que suena entre los vientos
es como un sediento beso, que vuela al aire
destinándose perdido: el soplo, suspiro interno que rebota en las palabras
Sueña despierto el sueño y se esconde, escabulle sus ganas.
La caricia nace en el cruce de las notas, pero queda en el camino.
Y los nostálgicos acentos que promueven sin querer a la esperanza,
Adquieren la fuerza para llegar al pensamiento.
La boca, estremece sus sentidos y exhala un trémulo quejido,
...y la triste melodía sigue errante en el espacio,
Se fusiona entre los cuerpos, se vuelve al fin un himno de victoria.