Una rosa roja con verdes
Espinas que en los dedos se
Me clavan en las manos como
Si de clavos se trataran haciendo
Brotar sangre como una pequeña fuente
Un hermoso niño mirome mientras
Agarraba la rosa quitandomela de las
Manos y sin el saber que las espinas
Se le clavarían en las pequeñas manos
Apreto bien fuerte la rosa que sus
preciosas manos se convirtieron
en una fuente de sangre que a
chorro sale
¡Mama!, el niño grita extendiendo
Sus manitas para mostrarla lo que le
Pasaba, vendole su madre las manos
Para que la sangre se cortara.