alicia perez hernandez

Cuando me vaya... y los silencios del alma

Cuando me vaya

 

Cuando ya no esté…

conmigo se irá el amor de mi vida;

el cielo, será más azul que nunca.

Por qué nací en Junio,

el mes, que divide el año, por la mitad,

cuándo  los árboles son verdes, y hay fruto.

Cuándo  me enamoré, en el cilicio, de mi vida

y se abrió la primavera para mí.

Cuándo  corté Claveles de amor y, junté Rosas;

llovió en Marzo, y me enamoré de él,  

vi, sus ojos negros, y no me resistí.

norte y sur se juntaron, para hacernos felices.

“Murió, una mujer con alma de poeta y, corazón enamorado”

Eso… dirán de mí…

Dirán... “las flores lloran su ausencia”

El viaje será breve, porque volaré en nubes de algodón

mi vuelo será, cómo, un banquete de bodas;

no faltara nada.

Mi vestido será, el de la novia, más bella,

Por qué estará confeccionado de caricias.

-Las que el amor supo darme-

Mis hijos, no lloraran,

serán felices, en sus días tristes;

por qué leerán mis poemas de amor.

Sentirán latir, mi corazón, en ellos

Me llevaré la poesía que alimentó mi alma.

Diré a, Dios cuanto lo amo

Le declamaré salmos y salterios;

cantaré odas, bailaré sueños.

Seré Ángel sin alas, sin premios,

sin antorchas, sin vuelo,

sólo  Ángel de amor…

Cruzaré el umbral, y diré...

“Llegué enamorada y llena de amor”

                                   

del que di, y del que me dieron...                                                     

del perdón que pedí,

del perdón, que me di,… Por amar así…

Sin llanto, sin risa...

Sólo un corazón lleno de alegría

por qué fui... AMADA

poesía sin saberlo… que era tu inspiración

envuelta en tus poemas de amor…

cuándo me vaya… nos reuniremos ¡Amor!

 

Alicia Pérez Hernández

-No es la pluma la que escribe, es el alma-

Todos los derechos reservados©

 

Los silencios del alma.

-para la dulce Alicia, mí amada azteca-

 

Los silencios

del alma se ahogan

en la sima

de la nada,

arden callados en lo profundo

del pozo sin agua,

ocultan amores

por lontananza :allende los mares

por tierras aztecas.

Los silencios del alma, sentados

en la piedra redonda de la llanura,

vierten el líquido en la caldera

interior

de la fragua humana

-palpitar

de alas interiores

que  vuelen...,-

esperando la carta de una clausura

-místico desvelo-

que no llega...

Los silencios

del alma -brisas de mar

proceloso-

dulcemente dormirán

dentro de los pensamientos mudos

-alamedas enamoradas, ramas de sueño-

sembrando rosas por la vereda...

Los silencios del alma: cielos distantes

frente al mar amaneciendo por no tenerte

-canciones de amor,  a mi amada azteca

en labios de esperanza, encendido

el corazón en noche larga, y oscura

bajo las estrellas... echándote de menos

Los silencios del alma ya no hablarán:

-\"muérame yo, -por tu amor dulce ali-

derramado en el cauce de la demencia\"-,

Abanicado por los pétalos de una rosa mexicana.

(A mi amada azteca Juereña de cd Juárez Chih) 

 

-Salvador 12-7-12 Úbeda- d.e.p.