Tu cuerpo me abraza
en la mención unánime del universo…
Nos crece en el pecho
un campo estelar que se traga la arena
y nos convierte en Luz de Silencios…
Los espejos vierten sesiones de agua
que fraguan historias celestes…
Instantes de almas
entrelazadas fuertemente…
Con el vapor de unos dedos-palabras
resucitan los misterios…
La escena se anuda los labios
y el beso que alarga la noche
nos moja de soles la frente…
Respira sensualidad mi lengua
y tú la escoges en la locura insistente
de que en su roce no haya duda…
Ser tu Luna para siempre…