Pienso en mí como si no fuera nada, vivo como si no fuera nadie.
Pasa la vida y el dolor no mitiga, el futuro es una nube negra en el horizonte, que se esfuma como humo en el aire, creo que la única esperanza es salir de aquí.
Debo luchar por él futuro aunque sea incierto, y desear que el mañana no sea mí pasado. Eliminar la derrota de mí mente, lo entendieron mal y no llegaron a comprenderlo, y eso debió ser lo que derrumbo mi muralla e hizo trizas mis defensas.
Personalmente creo, que debería tener la conciencia tranquila aunque haya podido cometer algún error. Algún día me enfrentare a todo ello y es posible que todo quede en una mera anécdota.
La vida sigue y no se detiene por mucho que queramos, ni podemos volver al pasado y cambiar los errores cometidos, errores sin sentido que nos asaltan en el futuro y se ceban con nosotros como si fuéramos los mismísimos culpables de la apertura de la caja de Pandora.
No provoque las siete plagas de Egipto ni el diluvio universal, tan solo fue un error que aún trato de enmendar. Entonces empezare a pensar con claridad y a saber quien soy en realidad.