Quiero que en tus ojos
se lea...
lo amada que fuiste,
corrí tantas veces
a tu encuentro...
no llegaste,
perdí la calma
y mis emociones.
Recorrí el bosque,
estabas ausente ...
el viento, la lluvia en mis ojos
y yo... buscándote...
Las puertas y mis brazos
abiertos, de mi rancho
esperándote...
Decías amar la tierra
y el barro, no llegaste...
Los gansos danzan
en las claras lagunas
y la luna esquivaba las ramas
de los árboles para verte.
Te grito en mi ilusión última
y re encuentro...
te abrazo, te beso y te llevo
a mi lecho de flores.
Tu pecho sollozaba,
te vi transparente...
como agua de manantial clara,
enterré mi cuerpo...
en tu carne viva.
Duérmete vida mía,
descansa...
siempre estaré acariciando
tu cuerpo y tu espalda.