Te veo desde lejos,
y me pareces una isla inexpugnable,
yo tengo un arco sin flechas,
una boca sin palabras y
ningún argumento logico a mi favor
para conquistarte.
Te veo tan lejana,
tan lejana como ese lugar que no conocere,
yo solo tengo un barco roto,
ningún peso en la bolsa
y todas las circunstancias
en mi contra para conquistarte.
Te veo tan alta,
eres la emperatriz de mi vida,
yo solo soy un esclavo tuyo,
un subordinado fiel,
con ninguna posibilidad de ascender
para siquiera besar tus pies.
Tu estas hecha de corales y
delicadas perlas,
yo naci de la tierra,
el sol me dio en la cara todos los dias,
debo asimilar nuestras diferencias con calma,
aunque aceptarlo me parta toda el alma.