Mañana ni podrás mirarme a la cara,
y pronto ni te acordarás de mi cruz.
Despertarás, desnuda, sin caricias en la mirada,
y te costará, incluso, prender la luz.
Reconozco que dejé que hablara el presente,
y obvié el pasado abrazando al futuro.
Mi vida, no me culpes, no logro tachar de mi mente,
que toda piedrecita en el camino es un muro.
Ni mi vida será trinchera,
ni tu destino puerto de mar.
No podía dejar que soportaras la espera,
no puedo imaginar el día que te deje de amar.
¿Cómo hago para no ver la vida en cuenta atrás?
¿Cómo alcanzar la meta, cómo hacer que cada día
sea
un paso
Más?