Me gustaría que me gustes
que las miradas ya no se crucen
subirnos juntos a la vida sin tener pasaporte,
todo pasa a oscuras de los postes
no vemos que los deseos apagan las luces.
El día todavía gira y la luna no llega
mejor tenerla bohemia
a que muera para nunca más traerla,
preferible que aparezca libre y coqueta
a no verla, con mis ojos podridos en la niebla
y mi sonrisa que brilla por su ausencia.
Me gustaría que fuésemos mudos
así las palabras no forjarían tantos muros
quiero gustar del silencio incomodo
poder vivir callado, apartado, descolocado
pero a mi modo.
Me gusta no tener oportunidad
me lleva a fantasear, palabrear, hablar
sentir, llorar, no pensar, asumir
que el rastro de tu rostro sin pudor
no volverá aquí.
Me gustó que hayamos sido todo
lo que secó con lodo
al sol no se romperá
te dije que me gustaría confiar
pero en esa misma confianza
fue donde conocí la deslealtad.
Tenía guardada
un pisca de bondad
hasta que la realidad
la arrebató cuando llegó la verdad.
Ahora solo me quedan los sueños
me gustaría que estos fueran mi sustento
pero hasta dentro de ellos
me gusta atormentarme hasta quedarme sin aliento.
Construirme como un niño
y desatarme con el viento
so violento, so pendejo
me gustaría decir que me entiendo
pero cuando me acerco nada creo desde adentro.