Retrospectiva.
Me veras en retrospectiva
entornando los acantilados
y fragmentos de sol entre los dedos
tornaran
a
mis oídos.
Dejarán su mística estela
las amapolas, los rastrojos
y la mansedumbre
parirá de nuevo
ya fuera del bosque donde cobijamos
la levedad de nuestra augusta
soledad.
Oraran sobre nuestro vientre
aquellos descendientes akasicos
magullando con su impronta
todo intento de amordazarnos.
Que ya no habrá horizonte
donde cubrirnos y regresarnos.
Nos tragamos todo el mar
para ir escupiendolo poco a poco
entre los huesos de esta sorda ciudad.