Mi luz invernal.
Un día nublado.
Cruce de miradas, relámpago infinito.
Un sentimiento cálido invadiendo hasta el más gélido corazón.
Mirada impasible y oscura. Mirada ilusionada.
Sonrisas relucientes. Sonrisas con metales entre los dientes.
La inocencia en sus palabras. Aquella alma inquieta disfraza de modestia.
Susurro descuidado. Cruel y sincero.
Suspiro, decepción, llanto y coraje...corazón etéreo.
El tiempo amparando a su pobre corazón ingenuo.
Las heridas se disipan tras una niebla densa,
donde nadie podrá doblegarse para reincidir en el dolor nuevamente.