Poemas de Pepita Fernández

PARA NO MORIR

Para no morir

intenté ser la frescura de un bosque

sin fantasmas de pájaros

con nidos de amores.

 

Para no morir

enterré los recuerdos de mieles salobres,

 levanté la hojarasca del camino

e intenté andar de nuevo.

Por las noches penetré

en la mansedumbre silenciosa

de los astros inmóviles.

 

Para no morir 

enfrenté a la vida que pasaba sutil

sin advertirla en su roce

y a los llantos los dibujé  con  goces.

 

 Para no morir

me agradé en mi desagrado,

me escapé entre engañosos velos,

imaginé un  mañana feliz

aún respirando en mi despoblado corazón.

 

Para no morir 

robé el fulgor de una estrella

me aferré a su luz…

y la llamé imposible.

 

Entonces me  infiltré

 entre la muchedumbre de metáforas

y un poema deshojó mi alma.