CALANDRIA MÍA
Inicio el lejano punto de nuestro amor y amado sueño
y clavo mi corazón en el centro sangriento
de mi sacrificio soñando en ti bella flor.
Ay, mi nena eres la mágica estrella mía
la farola de mis arterias poeta mía
y eres como las dulces lenguas del mar
cuando besan las sedientas arenillas
así te quiero ver en el vértice de mi elegía,
amor mío, sirenita de mis calandrias.
Eres el agua, eres la piedra, eres el grano y eres la harina,
la molinera poeta mía de las montañas de mi locura desmedida,
con la esperanza del sueño de idolátrate en la cúpula de tu capilla.
Te quiero ángelus de mi vida espuma blanca son tus retinas
que cruzan los mares de mis besos mirando triste la lejanía,
de tu canto calandria y alondra te proclamo la diosa Artemisa.
Quiero dulce amor mío que seas el tobogán de mis días
para ser los dos la gloria eternamente e infinita
y perdernos los dos en la selva para morir contigo
en los lechos tenues y entre la densa brisa.