Vacilante son los pasos de frio
que he podido tocar con mis calidos latidos,
me llenaste y solo me llenaste,
solo la llama interior me salvo
de una muerte de frio.
Congelé mis sentimientos
y tu no parabas ni un minuto
de acumular mas frio
y te congelas cada vez mas...
te congelas me atraviesas,
como si fueras una flecha, rosante,
brillante, y diversa como la roca
que no cesa.
Amor de los mil vientos
no me lleves a tus torbellinos
solo te dejare un recuerdo inalcanzable...
seras copos blancos, solo nieve,
manos heladas no me toques
porque sere el fuego
que derrita a tu ser mas bellos,
luz del cielo amacame nuevamente
en tu nieve.
Dejame ser el fuego de dia,
para seguir viviendo en pie
con la llama que consume mi piel,
dejame ser el consuelo,
no me dejes ser flameante
en los peldaños enamorados he infinitos
latidos de sangre fria y caliente...
Javier de la Rosa.-