Me hastié de tu pasado, del llanto humedecido
Del interés momentáneo, de tus besos furtivos
Del espejismo que son tus ojos, enceguecedores, Embusteros
Que reclaman atención, cuando todo está perdido.
Apartado en el olvido, casi agónico sentido,
Se posaba en mi habitación, la perdición,
Donde el consiente inconsciente, deja todo al subconsciente
En un mítico lugar de otro continente.
Los días del calendario fueron pasando sin detenerse,
Y este loco enamorado fue dejando de quererte,
Tu imagen en mi cabeza empiezo a desvanecerse
Tus huellas de mi cuerpo se borraron
Y mi corazón nuevamente, se hizo fuerte.
Javi Jimenez