La noche le va gastando
posiciones a los besos.
El encuentro sabe de esos
sensores que van mermando.
Tú, desnuda y, yo, luchando
por exportarme el apuro.
Me separo de lo oscuro
cada roce de la piel.
La noche es simple bajel
que habla de tiempo y conjuro.
La noche tan imprecisa
con sus toques de erotismo
diluyendo un aforismo
se acelera. La sonrisa
se vuelve falsa camisa
Nos está diciendo adiós.
La bruma se frena en los
bostezos de viejas calles.
Voy grabando los detalles
que se mezclan con los dos.