Mis años atesoran el autenticidad de joyas preciosas,
en el alma, mi sensualidad tiene esencia de perlas y rosas,
soy mujer de sentimientos genuinos y caricias generosas,
el resplandor del sol y la luna aún iluminan mis ojos,
porque allí resplandece el amor que encandila mi corazón,
sentimiento puro que me enciende de gana y pasión,
mis años guardan en el alma increíbles y dulces quimeras,
las que guardo como oro en paño, con rojos sentimientos,
extraordinarias vivencias y sentires que la vida me ha brindado...
los años, además, han sido testigos de mis heridas y amarguras,
no ha sido nada fácil para esta Luna y Poesía mis años vividos,
pues los desengaños me bufaron extremos agobios y mentiras,
con los que me derrumbé y en el alma llore indeciblemente,
sin embargo, logré luchar y hallar fuerzas para poder encumbrarme,
solo entonces, los años me dieron la valía de un diamante pulido,
gracias a Dios, en mi sendero, conocí valerosos y buenos amigos,
gente increíble que me colmo de imborrables y muchas alegrías,
admito que he desacertado como todo ser humano imperfecto,
pero, ante Dios me he arrepentido de corazón y él me ha acogido,
hoy en mí sendero resplandece el amor y el color de las cosas,
pues, un nuevo año de vida, recibo bendecida de esperanzas…
Luna y Poesía