Cómplices de la luna, del silencio, de los besos.
Cómplices de las fogatas y sus matices,
de la calidez de su centro y su brillo reflejado en las miradas.
Se despertó un sentimiento de mutuo acuerdo,
de extrañas pasiones, de preciosos momentos.
Tú vives en las paredes de mi corazón en forma de retratos,
que guardan los recuerdos, de escenas vividas desde hace tiempo,
de jardines de ensueño de salvajes colores.
Tu estas en mi naturaleza, en mi locura,
en mi cordura sin que pueda evitar quererte,
sin que pueda huir del sentimiento,
quisiera plasmar cada noche contigo,
y hacer fugas sin sentido y de lejanos recorridos.
Quisiera poder atrapar el tiempo y consumirlo en tu esfera,
en una burbuja helada suspendida que dibuje tu boca y su sabor quede en ella,
quisiera tocarte no de una forma física, sino de tal manera que te haya tocado el alma,
sin que te dieras cuenta, que te haya robado algo y así sin más preámbulos ser tu complice!