Yo fui alma un día
cuando confiaba en los dioses
fui alma hasta los catorce
de ahí comencé a dudar
y terminé con mi alma
y con mis dudas sin nombre
cuando supe que era energía
no alma ni agua ni sal.
Y me fui solo con la palabra
que me regaló un arconte
haciéndola valer
como un propósito real
y así es como me hice libre
más que los doce apóstoles
más que Buda y Alá s once
debo retirarme a orar
por este Dios que no conoce
más que su libertad.
Alma mía alma de donde
te vienes como alma a asomar
justo cuando llega la noche
y ahora que me fui a acostar.