Este mundo que arropa la casa
es mi mismo cuerpo
mi armadura
El fuego cruza la ventana
azotando las cadenas
sueltos los sonidos silenciosos
beso agradecido
al fuego de las sombras
las aguas de el viento
invasoras del rincón
ausencias alimenticias
cenizas ríos de renacer
miradas al antaño
albores de mi vacío
fuente que sello mis aguas
y pagaron con infinitas ansias