Diego Herlein

A una foto de mi madre

 

Surgió del fondo de alguna caja
una foto de una sonriente morena.
Ella mira al fotógrafo, o al sol, o a la cámara
y atrás se deja ver un cerco de plantas.

En el rostro de la muchacha esta la cara
joven y despreocupada de mi madre;
en otro tiempo, otra vida, otro encuadre
(esta imagen de mi madre se me hace rara)

Sin embargo esta imagen es la imagen
que soñe apenas unos dias despues
que tus ojos para siempre se cerraran,
que tu ultimo aliento se escapara.

En el sueño viniste a abrazarme, la cara
radiante y la sonrisa, mas grande que nunca
yo hubiese visto, y nada, no decías nada;
(no hacía falta, sobraban las palabras)

Despedida fue ese sueño, ahora veo,
la vida se te fue sin una palabra;
Mas nadie muere del todo, creo,
morirá el cuerpo, mas vive el alma.

Vive el espíritu, si no de vida plena,
vive en el recuerdo de los que te aman,
y contribuye a esta vida eterna
preservar esa memoria en palabras.

No vencerán estas palabras a la muerte,
a la real, claro que no, ya digo
la victoria que ahora se pretende
es sobre la otra muerte: el olvido.